Por: Tony Romero

 

Natalia Rivera

Trae sus tenis viejos

Por dar pasos al frente

Nunca pasos de cangrejos.

 

Es toda una guerrera

Jugándose el pellejo

Contra las injusticia

Busca el piso parejo.

 

Su voz se hizo notar

Dentro y fuera del Congreso

Si no cuadraba algo

Los paraba siempre en seco.

 

Como era oposición

Les molestaba eso

Se los decía en su cara

Y se los mandaba impreso.

 

Su mente ciudadana

La puso en movimiento

Llegando a trabajar

Y no a calentar asiento.

 

Buscando la igualdad

Ganándose el respeto

No faltó a las sesiones

Ni al parlamento abierto.

 

Su amor por los demás

Forjaron sus cimientos

Ahorita no la mueve

Ni el más violento viento.

 

Con sangre sonorense

Es hija del desierto

No pudieron callarla

Les faltaban argumentos.

 

Treinta y tres iniciativas

Fueron once aprobadas

Todas de un gran nivel

Pero se las congelaban.

 

No querían que Luciera

Ni tampoco que brillara

Por eso se archivaron

Aunque a la gente ayudara.

 

En el día legislaba

Y por las tardes visitaba

Las colonias conflictivas

Dónde la solicitaban.

 

Más de cien fueron la cuenta

A ninguna rechazaba

Por eso fueron diez mil

Las personas consultadas.

 

Esta historia hoy termina

Esta historia hoy se acaba

Pero no se me depriman

Vine otra temporada.

 

Esta vez será en Cabildo

Dónde tenga sus jornadas

De seguro la veremos

En la «H» olvidada.

 

Hermosillo dividido

Hermosillo en dos plazas

Esperemos que sea una

Los de arriba con la raza.

 

Ya con esta me despido

Saludos a la Natalia

La guerrera incansable

La que siempre da batalla.