Por: Marco Antonio Romero Juvera

 

Recuerdo aquel día cuando mi alma sufría

Mi corazón con fuerzas latía

Pues una lucha espiritual en mi interior se vivía.

 

Con un pasado negro y tormentoso

Convirtiéndose en mi peor pesadilla

Pidiendo a gritos que cesara mi agonía

Y suplicando por piedad que se acabará esta vida.

 

Recuerdo aquel día que no encontraba empatía

Y mis ganas de vivir poco a poco cedían

Creyendo que en el suelo por fin me quedaría.

 

Pero tú llegaste

Del suelo me levantaste

Y con tu amor y coraje

A mis demonios espantaste.

 

Recuerdo aquel día que pensé que moriría

Pero tú otros planes tenias

Y otra historia se escribe hoy.

 

Como buen padre tú curaste mis heridas

Y con tú aliento de vida

Redimido ahora soy.

 

A ti te debo toda mi alegría

La forma en que hoy veo la vida

Y sobre todo mi paz interior.

 

Tú eres grande, mis pecados perdonaste

En un nuevo hombre me trasformaste

Por eso agradecido soy.

 

De mi futuro no se esperaba nada

Solo una muerte anunciada

Por mi mala decisión

 

Pero en mi confiaste

Mi dolor te llevaste

De las drogas me sacaste

Y de las garras del alcohol.