Unidad de Perspectiva de Género de la Policía Estatal registra caso de éxito en atención a familia sonorense

Yolanda Ballesteros, coordinadora de la Unidad de Perspectiva de Género de la Policía Estatal de Seguridad Pública (PESP), relató un caso de éxito atendido por su área en la ciudad de Hermosillo.

Desde el mes de agosto agentes dieron seguimiento a un llamado por violencia familiar a través de la línea de emergencia 9-1-1, en la colonia Unión de Ladrilleros, que los llevó a atender a una familia en situación vulnerable, misma que acabó abrir sus puertas para hacerlos partícipes de momentos especiales.

“La mejor motivación es saber que cada día podemos ayudar a una familia o a una persona a que pueda liberarse de la violencia que está viviendo y tenga una salud mental que la motive a salir adelante de manera integral”, señaló Ballesteros.

La funcionaria comentó que después de ese primer contacto, “nos motivó continuar visitándolos al saber que son tres menores que se encuentran vulnerables por el entorno familiar, que son niños muy inteligentes y con una necesidad de querer progresar en la vida y que tienen el potencial para alcanzarlo”.

La coordinadora explicó que el hogar se encuentra a cargo del abuelo, quien se hace cargo de dos niños y una niña, con quienes se logró establecer un vínculo de amistad y a quienes se respaldó para retomar actividades que los lleven a una vida libre de violencia.

Con sus propios recursos, elementos de la PESP apoyaron a los menores con artículos de primera necesidad. Además, el joven de 15 años de edad fue motivado por los policías para no abandonar la escuela y continuar con sus estudios; incluso lo acompañaron en el proceso de compras de sus útiles escolares, así como en su primer día de clases.

En sus diferentes visitas a la familia, las y los agentes conocieron la inquietud del joven por el karate, quien los invitó a su ceremonia de ascenso de cinta.

Al relatar la experiencia que vivió el grupo de la PESP, Yolanda Ballesteros pidió a la ciudadanía ser “empáticos con las circunstancias que vive su familia, algún vecino o alguna persona de tu entorno. Que denuncien al 9-1-1 si ven un abuso de violencia a mujeres, menores, ancianos o discapacitados, para que la Policía Estatal o cualquier otra corporación pueda atenderlos y así trabajar en coordinación para ayudarlos a mejorar su calidad de vida”.