Por: Tony Romero

 

Sombras y gritos

Invaden a mi mente

Los cables se me cruzan

Y se corta la corriente.

 

Mi frente está que arde

Y mi cuerpo está caliente

No sé si estoy despierto

O me encuentro inconsciente.

 

Inconsciente de la vida

Que me tocó vivir

No tengo escapatoria

Ni tampoco a dónde huir.

 

El monstruo se despierta

Y se empieza a expandir

Me tiene acorralado

Y me quiere destruir.

 

Destruir los cimientos

Que mi esfuerzo ha construído

No es un rascacielos

Pero llevo varios pisos.

 

Me encuentro agotado

Y me encuentro sometido

Me pone tentaciones

Y me ofrece lo prohibido.

 

Prohibido que me rinda

Antes del amanecer

Las fuerzas me abandonan

Pero no voy a ceder.

 

No caigo en sus garras

Aunque me brinden placer

Todo lo puedo en Cristo

Quien me llena de poder.

 

Poder para enfrentarme

A ese monstruo del pasado

No voy a permitir

Que me quite lo ganado.

 

Me encuentro decidido

Y me encuentro preparado

Para pelear a muerte

Aunque me encuentre cansado.

 

Cansado de los vicios

De este mundo material

Ahora es diferente

Tengo mucho potencial.

 

No me deslumbra el oro

Ni la gente artificial

Ganar esta batalla

Para mí será crucial.

 

Crucial que yo destruya

A mi antiguo enemigo

Aquel que me empujó

A convertirme en mendigo.

 

Aquel que me abrazo

Disfrazado de un amigo

Pagando esa factura

Con dolor y con castigo.

 

Castigo y reprendo

Al demonio que hay en mí

Yo tengo autoridad

Para no ser infeliz.

 

No importa la función

Ni la obra ni la actriz

Mi herida está cerrada

Sólo queda cicatriz.

 

Cicatriz que me recuerda

Cuál es mi trayectoria

Por no tirar la toalla

Hoy escribo está historia.

 

La noche se hizo larga

Expulsando a la escoria

La paz ha regresado

Obteniendo la victoria.